Prevención y tratamiento de la retención de líquidos

Cuando llega el calor del verano solemos sentirnos al final del día hinchados, con sensación de que la ropa nos aprieta y los brazos, los pies y piernas se sientes pesados. Estos síntomas indican que estamos presentando retención de líquidos.

La inflamación o edema, conocido popularmente como retención de líquidos, es un incremento del líquido intersticial, es decir, una acumulación excesiva de líquidos en los tejidos, generalmente motivado por un desequilibrio en la linfa, que se encarga de regular el paso de los líquidos de una zona a otra.

Las causas de la retención son muy diversas y es necesario prestar atención ya que podría estar relacionado con problemas circulatorios, insuficiencia cardiaca congestiva, enfermedades renales o hepáticas, por lo que se hace necesaria una evaluación médica para descartar cualquier dolencia. En el caso en que la retención de líquidos no sea el resultado de una condición médica grave, puede aliviarse rápida y fácilmente.

8 maneras de combatir la retención de líquidos

1. Limitar el consumo de sal.

2. Comer alimentos ricos en potasio.

3. Ingerir magnesio.

4. Reducir los hidratos de carbono refinados.

5. Consumir vitamina B6.

6. Tomar diuréticos naturales como: infusiones de diente de león, curcuma, té verde. También zumo de piña y de limón y no olvidar incluir en nuestra dieta alimentos como el pepino y el perejil. Todos estos alimentos tienen un efecto similar a los medicamentos pero con menos efectos secundarios.

7. Practicar algún ejercicio como caminar.

8. Aplicar drenaje linfático manual.

 

¿Qué es el drenaje linfático manual?

El Drenaje Linfático Manual (DLM) es un método terapéutico, que consiste en la activación de la circulación linfática por estimulación de los vasos y ganglios linfáticos, mejorando así la evacuación del exceso de líquido intersticial. De ahí que una de las principales aplicaciones del drenaje linfático sea para ayudar a pacientes que padecen de retención de líquidos.

A diferencia de otros tipos de masajes el drenaje linfático se aplica con movimientos muy suaves, lentos, precisos y de presión moderada sobre los puntos de drenaje natural del cuerpo. Debe ser aplicado por un profesional ya que una mala práctica podría ser contraproducente.

Antes de un tratamiento es importante indicarle a su terapeuta si padece algún tipo de enfermedad e incluso es aconsejable que sea un médico quien le refiera el tratamiento de drenaje linfático.

El DLM también se aplica en post operatorio de cirugías estéticas, tratamiento de la celulitis, problemas de circulación, piernas cansadas y procesos de cicatrización entre otros.